La persecución del ángel

Hoy el cielo huye como un ave huyendo del frío
las escalinatas hoy están vacías del perfume de la gente
hay pequeñas nieblas aglutinadas esperando...
Es un momento extraño, de extraños minutos,
como que duele y se dispersa lento
como que se derrumba de alguna parte y se niega...
coyunturas rotas y almas dispersas.
Esta tan lejos que puedo hacerme migajas en el tiempo
y no podría ver la luz de las esmeraldas...
Es solo un paso y otro más hacia la muerte
y el escándalo del vuelo que cae estrepitosamente
y terrible sobre las piedras.
Un ángel me persigue...
y ni me ve.

Maria Antonia Segarra