Separación...



El invisible cuerpo de la que se arrima
y la necesidad de abrirse el camino
y parirse otra vez en la maleza
escondida de sus ojos y los espejos
la vida es un depósito de excrementos viejos
y la lucha por el verde servicio de la sonrisa
sangra en los amplios mármoles de Suecia.
El frío rompe los labios vespertinos
¿Quién nos decide como una abolición?
es tarde para pensarnos
tú y yo... yo y tú conspirándonos como algo prohibido
alguien debe morir
el terreno ya esta listo...

(Abril 2015)

Detrás del mundo y su lluvia



Detrás del mundo y su lluvia
de tu saliva
como arcilla virgen
puede resultar...
puede que se acerque a mi boca
un presagio, un viento, la soledad, una sonrisa
la hegemonía del sueño
puede que ates tus muñecas al universo...

FUENTE DE PENSAMIENTO



Soberbio espanto
lo que se ignora
y se convierte en el verdugo
y lo silencia un árbol...
La meta no cesa
ciego es el encuentro sobre el pedregal
La lluvia del horizonte
hace equimosis
en las palabras vestidas de negro
hacia el abismo...

El pensamiento es una cosa
que se atraviesa como un cuchillo...

Dónde se esconderá la voz de mi destino...


Dónde se esconderá la voz de mi destino
esta angustia como de estar perdida
como de noche y yo a la intemperie
me he abatido con los años
y he quedado adversa del otro lado de la calle
y la mirada atestada de imágenes ciegas
volar al otro lado de lo que sea
cada momento es un riesgo y no lo quiero correr
no muero... ni vivo
es vacío es obvio y se inclina hacia mi
recuerdo el canto que arrulla al niño que duerme hace tiempo
en el regazo
cansada de este cansancio
y con los labios azules
y nada que decir...

¿Hay alguien ahí?

Como las gotas que caen despacio...



Como las gotas que caen despacio en una lluvia turbia
un alma trabada en el tiempo...
Quiero volver
ausentarme... y volver
aguzar-me en las preguntas
tomar tu mano antes que la muerte corriera contigo
acertar con el palillo en las aceitunas
ese segundo, en aquella mirada, tal vez
correr y no pasear silenciosamente detrás
volver al aullido de las calles
hurgar ese lenguaje frondoso que me esperaba
volver a arrojarme al desierto de tus labios...
Tomar esa taza de café
maldecirte la madre aquella noche que no llegaste
rechazar cuerpos servidos con el alma vacía
Quiero volver... con los cabellos
con las telas quemadas en la hoguera de los ausentes
oscilar-me entre el día y la noche como un fantasma, huérfana
trepidante de silencio
construir un pedregal para mi
reflejar el mundo en las vidrieras empañadas de olvido
reconocerme en tu lenguaje denso y a piedritas...

...pero solo porque es domingo y es jodido.

LENGUAJE...


Olvidé alguna palabra en la calle
otras regadas por ahí
mi lenguaje reducido se pierde
hijo minusválido de la poesía
suplicándole al viento me meciera en su incertidumbre
enredadera de vértigos
Mi lenguaje es el lenguaje de los muertos
blanco de un abismo siniestro y raros males
mi lenguaje es sórdido como una puta
arrebujado entre las sábanas
soy una oración desolada
un sujeto adverso y un predicado en silencio
ábreme la lengua del placer
con venas que van a parir
con los coños mojados de verdad

¿A qué si no, entonces, vienes desde
tan lejos a auscultarme el alma?

Lo que tengo...


Con esos acuerdos que nos trae la muerte
y el infinito
con todas las promesas y mis puntos suspensivos
con todos esos pájaros
y sus vuelos a ninguna parte
con la semilla seca
la media taza de café
con la mirada que siempre imaginé darte
...ese vino pendiente

Con toda esta melancolía de mierda
que no acaba...

Oración Desesperada...




Quién me zurcirá los ojos al recuerdo
quién me verá ángel
pequeña y aferrada a las antiguas arrugas
de la tarde
Tu manto cobija el mundo
secreto interminable húmedo de
mar y humo
                                       Destierro
trepidante de mis manos
he vuelto a mi muerte que ahora es tuya
holgada frente a un espejo
que ya no me ve

Hazme piedra bajo tu pie

(Ahuyéntame de mi...)

Maria Antonia Segarra - Ella III

ELLA III



Es terrible conocerla, acercarse y percibir su aliento como un volcán,
angustioso oír sus sueños, un profundo abismo, la ceguera en esos
días de lluvia, cuando arrima el alma al hueco.
Una mariposa descentrada con su vuelo mágico detrás de las puertas
Y su silencio... de noche lenta, de pasos viejos, un silencio oculto en sus
cabellos milenarios, un silencio de beso largo, de caricia en espera.
La he visto sonreír y desdibujarse como el humo cansino desde los labios
A veces le grito para espantarle la muerte de los sueños, le tomo de las manos
para ocultar el frío de sus dedos, cuido de sus ojos.  Ella me pide el abandono,
se arrodilla para implorar el abandono de su cuerpo, de este lenguaje hueco que no
pare más.  Se maldice como una hereje, suplica en otredad, por su vida, por lo que no puede
decir, poro todo aquello que se vierte a su alrededor.

Y sufre su propio lenguaje, la desesperación del lenguaje ocluido en el alma,
temeroso de naufragar al primer intento de nado.  He olvidado ya su nombre, abrazada a ella
he olvidado su rostro, solo siento su perfume y se va con el viento.
Dice un nombre suave, muy bajo muy bajo, a veces imperceptible como si quisiera guardarlo en
secreto consigo misma y es un niño que la visita con cara de ángel, le acaricia los brazos y le
sonríe, es él quien la cuida de sí misma y sus pasiones, lo he escuchado cantarle, de madrugada,
para calmar el demonio de su mente que la atormenta...

Ella ya olvidó el camino, se ha quedado quieta junto a la vera...

(2014)