Quedo aquí, viéndome en la sombra
Envidio la transparencia
A gatas me revuelco en su cuerpo, que me acecha.
El esta convencido del amor y la muerte
Me llevo encadenada a la cintura sus ríos,
profano los días que me roba.
La inutilidad de la ventana me desquicia
Ha terminado el olor del cuerpo
A mitad de la raza me escribo tu nombre
Corren galopando las caderas
En el sueño solo yo restauro su boca rota
Dame aliento de pecho
Crújeme, como la puerta, azotada por el viento.