Me hice una sombra de tierra y arena,
oscura y gris como un pantano.
No supe alucinar, romper el fuego y desatarme con ojos furiosos
fuera de abismos hondos,
porque me detuvieron antes de nacer como un símbolo de nada y
vine como una señal ignota a crepitar por el vacío.
Me adulteraron la muerte...
solo me dejaron los ojos arrugados
llenos de ramas secas que oscilaban en mi como un carnaval de liebres
sucias,
soy la madre triste de mi y la hermana a la que basurearon,
soy la última luna de un espacio perdido,
sin un pasado que sonreir...
me degollaron en una vagina estrecha
y pusieron un sello de palabras...
Fuera de mi... yo
dentro de mi... nada
M.A. Segarra